Sábado, 14 de Febrero, 2009
Un grupo formado por sesenta personas de distintos lugares, Yepes, Fuenteobejuna y Peñarroya, nos reunimos en la casa que la Congregación de la Presentación de María que tiene en Peñarroya-Pueblonuevo. No hubo necesidad de muchas presentaciones porque enseguida notamos que, sin conocernos, teníamos muchas cosas que nos unían y nos hacían sentirnos muy satisfechos de estar juntos. Sentimientos que quizás estaban dormidos, pero no olvidados, y que deseábamos transmitirnos: el ardor, la fe y el espíritu de oración que María Rivier nos dejó como herencia a los que conocemos su carisma.
Entre los muchos testimonios que se dieron, hubo algunos que repitieron los distintos grupos: "Las reuniones de la Asociación nos ayudan a profundizar más en la vida de María Rivier y a rezar con más devoción por las cosas cotidianas de nuestra vida". "En nuestras oraciones pedimos mucho a Dios para haya vocaciones, especialmente en la Presentación de María".
Además de a la Oración y a la Reflexión, dedicamos parte del encuentro a compartir una comida que, aunque humilde, a todos nos encantó.
Podemos decir que se cumplieron las palabras que María Rivier decía a sus hijas:"Juntémonos y formaremos un solo corazón y una sola alma".
Debemos repetir este encuentro. Y animar a las personas cercanas a la Congregación para que participen y disfruten de estos momentos de alegría y de enriquecimiento del espíritu.
.jpg)
No hay comentarios:
Publicar un comentario